Staff
@linea_th
Ferrari perdió el rumbo cuando introdujo un paquete de mejoras técnicas en el Gran Premio de España donde destacaba un nuevo suelo para el SF-24 y, desde ese momento, la suerte de Charles Leclerc ha cambiado con apenas un quinto sitio en Barcelona y dos carreras consecutivas fuera de los puntos, con excepción de la sprint de Austria.
Ante esta situación el jefe del equipo Ferrari, Frederic Vasseur, admite tienen un problema de porpoising, el mismo que afectó a casi todos los equipos cuando se introdujeron las nuevas reglas en el 2022 con el regreso del efecto suelo.
“Lo que tenemos es un problema aerodinámico, sí, porque cambiamos las piezas aerodinámicas y, entonces, el rebote apareció de nuevo en España”, dijo el francés al concluir la carrera en Silverstone donde solo Carlos Sainz logró puntos.
Con el objetivo de intentar corregir el rumbo, en Silverstone Ferrari invirtió gran parte de su tiempo probando nuevas configuraciones tanto en el coche de Leclerc como en el de Sainz, pero solo en el español tuvieron efecto con el monegasco eliminado en la Q2 del sábado.
Aunque Ferrari tiene en claro dónde están las debilidades, Vasseur admite no será sencillo encontrar el camino para volver a pelear con Red Bull como lo estaban haciendo al inicio del 2024 y anticipa dos carreras difíciles en Hungría y Bélgica antes de las vacaciones de verano.
"Para solucionarlo, hay un montón de soluciones, algunas que comprometen el rendimiento y otras que no, o que afectan al desarrollo de un paquete que es donde estamos ahora. Tendremos que lidiar con ello en la próxima carrera con el coche actual, y cuanto antes mejor traeremos una actualización con menos rebotes”.
“En los últimos 16 meses, todas las actualizaciones que trajimos tuvieron una correlación muy, muy buena con lo que hicimos en el túnel de viento, pero esta vez hemos tenido un problema”.
El jefe del equipo admitió que la pérdida de tiempo del viernes para analizar las diferentes configuraciones aerodinámicas fue un “sacrificio”, pero entendía “era una decisión difícil que había que tomar”.
“Sabíamos de antemano que estaríamos en una situación difícil en Silverstone. Tomamos la decisión antes del fin de semana y creo que fue la decisión correcta. La correlación está bien, la carga aerodinámica y la correlación están bien. Creo que sigue siendo una cuestión para todos que a veces el efecto rebote ap
"Para solucionarlo, hay un montón de soluciones, algunas que comprometen el rendimiento y otras que no, o que afectan al desarrollo de un paquete que es donde estamos ahora. Tendremos que lidiar con ello en la próxima carrera con el coche actual, y cuanto antes mejor traeremos una actualización con menos rebotes”.
“En los últimos 16 meses, todas las actualizaciones que trajimos tuvieron una correlación muy, muy buena con lo que hicimos en el túnel de viento, pero esta vez hemos tenido un problema”.
El jefe del equipo admitió que la pérdida de tiempo del viernes para analizar las diferentes configuraciones aerodinámicas fue un “sacrificio”, pero entendía “era una decisión difícil que había que tomar”.
“Sabíamos de antemano que estaríamos en una situación difícil en Silverstone. Tomamos la decisión antes del fin de semana y creo que fue la decisión correcta. La correlación está bien, la carga aerodinámica y la correlación están bien. Creo que sigue siendo una cuestión para todos que a veces el efecto rebote aparece, y es bastante difícil de correlacionar porque no tienes rebote en el túnel de viento”, explicó el directivo al señalar que no encuentran la forma de eliminar un problema que Mercedes ya vivió en 2023 y 2024 y ahora parece haber superado.
Con información de Excélsior.