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A 45 días de las fiestas patrias, como el Grito de Independencia del 15 de septiembre y el desfile cívico-militar del 16, el gobierno de Puebla aún no decide si conmemorará públicamente dicho evento como sucede año con año, ya que la pandemia no lo permitiría.
En conferencia de prensa matutina, el gobernador Miguel Barbosa compartió que tomar una decisión al respecto es "complejo", ya que implica tomar en cuenta la costumbre de todos los mexicanos de salir a celebrar la independencia.
"Es un hecho complejo porque en el alma de los mexicanos está la celebración de su independencia y desde mi opinión se van a reunir a como dé lugar".
A pregunta de MILENIO, expresó que "no es asunto de decisión política", sino "una realidad sociológica y cultural, por lo que pidió tiempo para continuar analizando si habrá o no ceremonia del Grito de Independencia en el zócalo de Puebla.
"No lo sé todavía, déjenme que no dé opinión todavía sobre eso, es muy difícil, vamos a ver, que el padre Hidalgo, Morelos y Dios nos bendigan".
Sin embargo, añadió que haya o no haya la celebración pública de dicho evento, el mexicano arribará a las plazas cívicas del estado, de su municipio y de su junta auxiliar de residencia para salir a celebrar como acostumbra todos los años.
"Puede no haber grito pero ahí van a estar, es un convencimiento que yo tengo y mi decisión está girando en torno a eso".
El jueves, el presidente Andrés Manuel López Obrador comentó que sí podría haber Grito de Independencia afuera de Palacio Nacional, pero con acceso restringido de hasta 500 personas para garantizar la sana distancia en el lugar.
Con información de Milenio